Por Aitor Lozano Sánchez
DAVID LEAL ESTEVE. Composición
David Leal Esteve nace en Castalla en 1994. Es Titulado Profesional de Música en las especialidades de Piano y Trombón, Graduado en Publicidad en la Universidad de Alicante y Graduado en Composición en el Conservatorio Superior de Música «Joaquín Rodrigo» de Valencia, donde obtiene el Premio Extraordinario Final de Título. Ha estudiado con profesores como Marc Garcia Vitoria, Voro Garcia Fernández y Andrés Valero Castells, entre otros.
En su búsqueda de un lenguaje personal dentro de una estética de vanguardia, ha podido estrenar obras con la Banda Sinfónica Municipal de Valencia, la Jove Orquestra de la Generalitat Valenciana, el octeto Nineties Trombone Ensemble o el cuarteto de saxofones Lumina Ensemble. En los últimos años ha tenido una notable presencia en el prestigioso Festival de Música Ensems, donde ha participado además en el proyecto pedagógico con la composición de una obra por encargo del Institut Valencià de Cultura..
¿Cómo has preparado este premio?
Creo que la preparación del premio se da realmente a lo largo de toda la carrera, de manera que cuando llega el momento lo puedes afrontar. En nuestro caso, consistió en la composición de una obra a partir de un material dado durante aproximadamente tres semanas, por lo que fue fundamental tener tiempo disponible para dedicarle. Lo primero que hice fue analizar en profundidad ese fragmento que se nos dio para decidir de qué manera se reflejaría en la pieza. Una vez los materiales a utilizar estuvieron claros, procedí con la escritura de la obra tal y como hago siempre, solo que con algo más de prisa.
¿Qué han significado para ti estos años en el Conservatorio?
Han sido unos años de estudio muy intensos en los que he sido muy feliz, tanto por las amistades que he entablado como por todo el proceso de aprendizaje. He podido acercarme a la composición tanto desde el punto de vista teórico como desde el práctico, pues el departamento siempre procura ofrecer oportunidades para que los alumnos podamos estrenar nuestras piezas. Después de mi paso por el conservatorio, tengo la sensación de haber conseguido un cierto criterio y una buena base, aunque todo ello unido a la convicción de que todavía está todo por aprender.
¿Cuáles son tus planes más cercanos?
Actualmente estoy preparando las oposiciones para acceder al Cuerpo de Profesores de Música y Artes Escénicas en la especialidad de Fundamentos de Composición. Más allá de la propia composición -que no dejaré-, el mundo de la educación musical dentro de los conservatorios es donde me gustaría trabajar. Cuando fui alumno por primera vez de armonía y análisis me fascinó poder entender cómo funciona la música, y me encantaría poder dedicarme a transmitir esos conocimientos. Además, todo ello es una manera de, como decía, continuar mi propio aprendizaje.
¿Algún consejo para los estudiantes, para poder afrontar con éxito un Premio?
Tal y como avanzaba en la primera respuesta, creo que el premio se puede afrontar mejor si la carrera se ha realizado con la dedicación que requiere, especialmente en la asignatura de composición. Más concretamente, mi recomendación para hacer frente al premio sería intentar conciliar tu lenguaje personal con el material de partida y con la originalidad que se suele pedir en las bases. Por otro lado, más allá de la estética, creo que es importante procurar que la pieza tenga la mayor coherencia posible, sin que nada quede sin justificar. ¡Mucha suerte a los futuros alumnos y alumnas que os presentéis!
JAVIER CIORDIA MARTÍNEZ. Percusión
Nace en Moncada (Valencia) en 1999, donde empieza sus estudios musicales en el Centro Artístico Musical de Moncada con el profesor Raül Doménech Rubio. Continua sus estudios en el Conservatorio profesional “Ciutat de Moncada” con el profesor Joaquín Lambies Zanón, donde obtiene en 2018 el “Título de Técnico de las Enseñanzas Profesionales de Música en la especialidad de Percusión” y el “Premio extraordinario de las enseñanzas profesionales de música” por consenso del jurado de dicho conservatorio. Ese mismo año ingresa en el Conservatorio Superior de Música “Joaquín Rodrigo” de Valencia. En 2022 se gradúa con las más altas calificaciones, obteniendo así el “Título Superior de Percusión” y el “Premio extraordinario de música” bajo la tutela de Manel Ramada Balaguer, Joan Cerveró Beta y Manuel Tomás Gil.
Actualmente es percusionista en la prestigiosa orquesta de bandas sonoras, Film Symphony Orchestra, bajo la dirección de Constantino Martínez-Orts. Ha realizado conciertos en los auditorios más importantes y reconocidos de toda la geografía española. Asimismo, compagina su actividad musical como intérprete con el mundo de la docencia y la enseñanza
¿Cómo has preparado este premio?
Sinceramente, con mucha dedicación y muchas horas de estudio. El repertorio a montar fue muy exigente; sin duda un verdadero reto ya que además disponía de tiempo limitado para estudiarme las obras. Realmente, dos de las tres piezas ya las tenía medio montadas – “Rebonds B”, I.Xenakis y “Ripple”, A.Miyoshi -. Sin embargo, la obra obligada fue la única que me llevó más horas de estudiar y más dedicación: “Omar I” de F.Donatoni – para vibráfono -, exige la máxima destreza técnica y la más alta concentración para poder interpretarla correctamente.
No voy a entrar en detalles técnicos de la obra, pero sí que puedo advertir que, para llegar a tocarla en estos dos meses, tuve que dedicar cada día entre dos y tres horas de estudio. Todas las mañanas, cogía mis baquetas y me dirigía a lo que considero mi “casa musical”, el Centro Musical de Moncada, donde pasaba casi toda la mañana tocando y preparándome el premio de música.
¿Qué han significado para ti estos años en el Conservatorio?
La verdad es que han sido cuatro años que se me han pasado volando, también en culpa por la pandemia del Covid-19, que paralizó toda la actividad musical de mi segundo curso. Sin embargo, a pesar de esto, han sido cuatro años realmente increíbles y maravillosos, en los que me llevo un montón de anécdotas y de recuerdos, muchos de ellos muy vinculados a mis queridos compañeros de percusión, como los célebres almuerzos en la cafetería o los formidables ensayos de la orquesta de percusión, entre otras cosas. Pienso que, sin la buena relación y el buen ambiente de trabajo que se ha generado – y en parte hemos querido fomentar -, no hubiera sido lo mismo. Ahora que ya he terminado mis estudios superiores, hecho un vistazo atrás y veo la gran generación de percusionistas que ha pasado por el Conservatorio de Valencia, y que hoy en día son grandes profesionales de la música; hecho un vistazo hacia delante y también veo la estupenda generación que hay actualmente formándose, constituida por gente que sé que va a llegar muy lejos no solo por lo buenas personas que son, sino también por el alto nivel musical que existe y por lo bien que tocan uno y cada uno de ellos. En definitiva, todo esto me hace sentir super orgulloso y super agradecido de haber podido formar parte de esta pequeña-gran familia.
¿Cuáles son tus planes más cercanos?
Mis planes más cercanos se centran en terminar el Máster en el que me encuentro actualmente estudiando. Una vez acabe, me interesaría realizar un segundo Máster centrado en la investigación performativa. Mientras tanto, estoy abierto a todo tipo de proyectos musicales que vayan surgiendo. Sin embargo, tengo muy claro que me gustaría opositar en orquesta o para ser docente en conservatorios de música. También – a pesar de que actualmente es algo inviable – uno de mis objetivos más a largo plazo – y que me haría mucha ilusión realizar – es participar en algún concurso de percusión de relevancia; no obstante, soy consciente de que esto requiere mucha dedicación y tiempo de estudio, tiempo que actualmente estoy empleando en otros ámbitos y proyectos.
¿Algún consejo para los estudiantes, para poder afrontar con éxito un Premio?
Pienso que para poder afrontar con éxito un premio es importante ser constante y planificado: constante en el sentido de que todos los días es fundamental tocar y estar en buena forma técnica para poder abordar las obras sin ningún tipo de problemas; y planificado para organizarse el estudio y marcarse pequeñas metas – por cada sesión de estudio – para poder alcanzar el objetivo final – que en este caso es conseguir el premio -. Considero que es importante también escoger un repertorio acorde a la situación, sobre todo que ya hallamos estudiado previamente y rodarlo – tocarlo – delante de un público – bien sean tus amigos o tus familiares – para así abordar mejor y con mayor naturalidad la audición final.
CARLOS BARBÉ GONZÁLVEZ. Piano
Comienza su formación musical y pianística hacia el año 2011, e inmediatamente después ingresa en el Conservatorio Profesional de Música de Valencia, donde cursa las enseñanzas profesionales en la especialidad de piano. En el año 2022 finaliza sus estudios en el Conservatorio Superior de Música de Valencia bajo la tutela del catedrático Don Eugenio José Marrades Caballero.
Durante su etapa de estudiante, recibe una sólida formación musical, artística y técnica de la mano de pianistas y profesores como István Gulyás, Rita Wagner, Ferenc Rados, Nikolai Demidenko, Stephen Hough o Josu de Solaun. Paralelamente a su formación reglada, desarrolla una notable actividad como pianista acompañante, concertista y músico de cámara.
Formado también en tratadística y música antigua, ha dirigido durante varios encuentros a diferentes ensembles reservados a la interpretación de la música de los siglos XVII y XVIII de manera históricamente informada.
¿Cómo has preparado este premio?
En su esencia siento que el proceso de preparación ha sido similar al de cualquier otro recital, concierto o audición ya que ha partido del estudio, la ilusión y la pasión. Sin embargo, en la preparación del premio extraordinario han existido dos motivaciones añadidas. Por un lado, la oportunidad de tocar por última vez como alumno en el CSMV, institución que me ha acompañado durante los últimos cuatro años. Por otro lado, la posibilidad de probarme a mí mismo como pianista profesional al presentar un programa enteramente nuevo para la ocasión. Por todo ello ha supuesto una experiencia enriquecedora, con gran valor sentimental y donde se han visto florecer las herramientas desarrolladas durante este periodo formativo.
¿Qué han significado para ti estos años en el Conservatorio?
Uy, ¡pues un montón de cosas! Ha supuesto un proceso de aprendizaje de muy grandes proporciones, ya que ha sido un periodo en el que poder disfrutar de todo lo que ofrece el centro para la experiencia musical, personal y profesional. Ha significado una oportunidad de conocer a gran cantidad de personas, fantásticos profesionales y compañeros, con los que el día de mañana poder llevar a cabo proyectos y compartir música juntos. Asimismo, ha supuesto una apertura de mente poder entrar en contacto con docentes de ciertas especialidades dentro del ámbito musical que me eran totalmente desconocidas. Por último, ha sido muy significativo enriquecerse de un maravilloso personal no docente, como el personal de conserjería, secretaría o biblioteca, que es uno de los espacios más importantes y valiosos para mí. Por todo esto, creo que el centro ha favorecido mi formación como artista, pero especialmente ha significado una oportunidad de crecer como persona.
¿Cuáles son tus próximos planes más cercanos?
Pues actualmente me sigo formando. ¡Y espero no dejar de hacerlo! Sigo estudiando de forma autónoma el repertorio, así como acompañando a otros músicos y encontrándome con compañeros para hacer música de cámara con bastante asiduidad. También tengo a la vista las próximas oposiciones para conservatorio, pues me encantaría satisfacer mi vocación docente y poder enseñar música a las próximas generaciones, siguiendo los pasos de mis profesores y maestros a los que admiro profundamente.
¿Algún consejo para los estudiantes, para poder afrontar con éxito un Premio?
Pienso que, como músicos, tanto nosotros como nuestro trabajo están casi siempre expuestos al criterio de otros. La crítica, un tribunal, un jurado, un profesor, ¡en ocasiones, hasta nuestros propios padres! Por lo que creo que el mejor consejo que podría dar a un compañero para afrontar el proceso del premio es que por muy perfeccionista que sea a la hora de tocar, sea realista. Todos tenemos derecho a fallar, como a tener un mal día e incluso a tener el mejor momento sobre el escenario y con el instrumento, independientemente del resultado. Creo fielmente que el verdadero éxito para cualquiera de nosotros no es adquirir un premio o un reconocimiento cuya dotación está sujeta al criterio de otras personas. Sino el incalculable valor que tiene el proceso de aprendizaje que cada uno de nosotros se lleva a la mochila tras limpiar y guardar el instrumento.
BLANCA RUIZ CASTILLO. Canto
Soprano, contrabajista y graduada en Bellas Artes, es Premio Autonómico de Canto de la Comunidad Valenciana, Premio Extraordinario final de Grado Profesional y Premio Extraordinario final de Grado Superior en canto. Nace en Tarragona y comienza sus estudios de contrabajo a los 6 años. Continúa Grado Profesional de Música en el Conservatorio José Iturbi de Valencia de la mano de Francisco Lluch, en la especialidad de contrabajo y de María Ángeles Peters, en la de canto. Ha cursado estudios Superiores de Contrabajo en el Conservatorio Superior de Música Joaquín Rodrigo de Valencia con Francisco Ruiz. Ha sido miembro de la Orquestra Filharmònica de l’Universitat de València, Orquesta Martín i Soler, Joven Orquesta Sinfónica de la FSMCV y Jove Orquestra de la Generalitat Valenciana.
Es alumna de la catedrática Gloria Fabuel, bajo cuya tutela ha cursado Grado Superior de Canto y el máster operístico. Ha estudiado el módulo de Una ventana al Belcanto en el Conservatorio Luigi Cherubini de Florencia con el maestro Gianni Fabbrini. Profundiza en el repertorio operístico y de canción de concierto con Adrià Gràcia y recibe lecciones magistrales de Alessandro Amoretti, Laura Polverelli, Giulio Zappa, David Menéndez, Daniel Gil de Tejada, Ramón Vargas, Andrea Severi y Mª José Monitel. Actualmente cursa un máster de interpretación operística en el Conservatorio Superior de Música Joaquín Rodrigo de Valencia.
¿Cómo has preparado este premio?
Escogí las obras de forma que fueran variadas en cuanto a estilos, y de manera que me permitiera demostrar lo aprendido durante estos años. Mi profesora, Gloria Fabuel, y el profesor de repertorio Adrià Gràcia me ayudaron a prepararme. Quise incluir una obra en la que me acompañaron un grupo de amigos músicos con violín, viola, contrabajo y voz de mezzo, lo cual supuso un trabajo extra porque había que ensayar con el grupo, pero que me permitió disfrutar de esa última obra muy arropada por los compañeros. Principalmente me centré en interpretar, demostrar lo aprendido a lo largo de estos años y sobre todo disfrutar en el escenario.
¿Qué han significado para ti estos años en el Conservatorio?
En estos años, me he formado como músico, tanto a niveles teóricos como interpretativos. El profesorado que he tenido la suerte de tener me han ayudado muchísimo. Y he encontrado también grandes compañeros y amigos. Con lo cual, no puedo estar más agradecida al CSMV.
¿Cuáles son tus próximos planes más cercanos?
Actualmente estoy realizando el Máster en Interpretación operística en el conservatorio, al mismo tiempo que me preparo para realizar pruebas para encontrar oportunidades de seguir mejorando en mi formación y poder encaminarme hacia una vida profesional como cantante lírico.
¿Algún consejo para los estudiantes, para poder afrontar con éxito un Premio?
Creo que el mejor consejo que podría dar es ser organizado y constante en el estudio, esto te permitirá subir al escenario con la seguridad de que el trabajo está bien preparado. Y una vez en el escenario, hay que disfrutar, demostrar que esto es lo que te apasiona.
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